13 septiembre 2008

Asociación Peones Negros de Barcelona - 11 de septiembre de 2008: Libertad

 

Once de septiembre de 2008, una "diada" de Cataluña más, para nosotros, otro "once de cada mes", este fue el que hizo 25, sin falta. Este relato, un día después, va dedicado a los que estuvieron, y a los que no asistieron; a los que recuerdan el 11 de septiembre de 2007 y a los que lo han olvidado por completo. Para qué nos vamos a engañar, nuestras previsiones, se cumplieron, apenas acudió una treitena de fieles a la causa de la Libertad, sabiendo, que si el concepto no se sustancia, el término queda vacío y sin sentido. Por la mañana, y a lo largo de todo el día no faltaron las manifestaciones de reivindicación nacional; a nosotros nos ha tocado compartir día y espacio con los que han convertido la derrota política y militar de la Cataluña feudal frente a las tropas de Felipe V, en una supuesta legitimidad nacional. 

Plaza de San Jaime. Ayuntamiento
 
  Por la mañana las ofrendas al monumento del héroe destilado, Rafael de Casanovas habían estado ambientadas con abundante coro de pitos y flautas. Jordi Pujol hacía guiños nerviosos a una velocidad llamativa, mucho mayor de la habitual. Para los del PPC tampoco faltaron los improperios... ¿Qué se les habrá perdido en ese homenaje?. Hubo ambiente para todos.

  La tarde parecía tranquila, después nos enteramos que independentistas de izquierda y derecha, se habían enfrentado a palos... ellos sabrán. Ciertamente las "senyeras" que deberían colgarse en los balcones de los catalanes de pro, brillaban por su ausencia, una aquí y otra allá, pero destacando una superlativa escasez, así cada año; esto no concuerda en absoluto con el fervor nacionalista que se demuestra en las urnas; deben votar a los menos malos, sin importar si son nacionalistas, o no lo son. Mi vecina cuelga una "senyera" cada año, pero claro, ella es una reputada, en nómina del aparato político.  Las calles del barrio gótico de Barcelona, estrechas de por si, eran intransitables debido a los corrillos que se forman alrededor de los bohemios callejeros con licencia municipal. En los aledaños de la plaza de San Jaime, los furgones antidisturbios, esperaban aparcados dificultando aún más la corriente humana. La plaza muy animada, llena de turistas y de paisanos, nosotros estirando el cuello para establecer contacto con el resto de PPNN.

  Antes de cada concentración, nos presentarnos a los cuerpos de guardia del Ayuntamiento y de la Generalidad. Los de las unidades móviles, suelen intercambiar algunas palabras con nosotros... Casi en medio de los saludos de hermandad y bienvenida, poco antes de las ocho, se acercó un mando de los Mossos d'Esquadra, ya nos conocen por habituales, pero en esta ocasión, nos pidieron que no celebrásemos el acto previsto. Nuestra negativa no agradó, pues "disponían de información" y tenían que "garantizar nuestra integridad física... era mejor no dar pie a posibles agresiones". Solamente quedaron medianamente tranquilos cuando nos ubicamos en el lugar más conveniente a su operativo, y les comunicamos que no teníamos previsto instalar megafonía. Todo ello en un ambiente cordial y sin sentirnos presionados en ningún momento.
 
Algunos PPNN-BCN
 
  Nos ubicamos al pie de la fachada del Ayuntamiento, junto a la entrada de la Calle Fernando. Los cuerpos de seguridad del estado tomaron posiciones en la plaza. Al poco, aparecieron los independentistas; se ubicaron en la esquina del Ayuntamiento opuesta a la nuestra, frente a la Calle de la Ciudad, al pie de la estatua de San Jaime. Nosotros en silencio, esperando a las ocho; los separatistas coreando como energúmenos consignas contra todo lo establecido; no se percataron de nuestra presencia y permanecieron alejados de nosotros hasta que desplegamos las banderolas; a los pocos minutos, los "guarros" -que así llaman a los independentistas en determinados círculos- se enfrentaron a los PPNN, la situación del 11 de septiembre del año pasado se repetía. 

Fuerzas de seguridad del Ayuntamiento de Barcelona
 
  Como por arte de magia los efectivos policiales se calaron sus cascos y se multiplicaron por cuatro, incluso aparecieron antidisturbios del Ayuntamiento, cosa poco común. La plaza estaba surcada por distintos cordones policiales, -cuatro de ellos cubrían todos nuestros flancos-, perros olfateando cada rincón, un helicóptero sobrevolando en todo momento la zona; los furgones y las ambulancias, solo en la calle Fernando, en un rosario interminable, jalonaban una de las aceras desde la Plaza hasta la Parroquia de San Jaime. Ni que decir tiene que la policía secreta seguro estaba más cerca de nosotros de lo pudiéramos imaginar.

La evidencia demuestra que el escenario que se había planteado desde las fuerzas de seguridad, era crítico, quizás esperaban una importante afluencia de público afín a los PPNN, con una alta probabilidad de disturbios; o por contra, y como había sucedido en meses anteriores, un reducido grupo de PPNN concentrados, y por ello vulnerables. De cualquier forma, el despliegue de medios estaba justificado habida cuenta de las reiteradas amenazas que venimos sufriendo de parte de radicales: el once de septiembre de 2007 sonó el himno de España en la Plaza de San Jaime, y eso no nos lo perdonarán nunca.
 
Los llamados "guarros"
 
  Desde hace meses no portamos megafonía, tras las elecciones del 9 de marzo, la preparación de las concentraciones se ha reducido a lo indispensable; solamente los más concienciados son fieles a la cita. Así, cada mes formamos un círculo y mantenemos la tertulia de rigor. En esta ocasión el círculo se redujo a un punto, para poder oirnos unos a otros. Los gritos de los "guarros", en algunos casos alaridos salidos de posesiones sin nombre, no nos dieron otra opción, era imposible desarrollar nuestro habitual coloquio.
 
Mossos d'Esquadra conteniendo a los "guarros"
 
  El cordón policial que nos rodeaba era permeable, la normalidad en la Plaza se mantenía a pesar de todo, y aquellos que sentían curiosidad por el centro de atención - nosotros-, se acercaban e incluso participaban en la charla. Esto me obligó a separarme del grupo y andar de aquí para allá, escudriñando e intentando adivinar actitudes indeseables; pienso que no fue negligencia por parte de la policía, ellos, seguro más duchos en estas lides, vieron gente de bien en actitud correcta.

  Tomamos la decisión de abandonar la Plaza a las ocho y media, lo habitual es que nuestras concentraciones acaben puntualmente a las nueve, pero en esta ocasión quisimos atender a la petición inicial de los Mossos, por deferencia hacia ellos, al fin y al cabo, trabajadores como nosotros, también actores de este cuadro surrealista y kafkiano... Entre los PPNN no gustó la toma de postura, son valientes, mantienen sus convicciones, y las quieren hacer valer, espero que este escrito les convenza.  Nos acercamos a unos cuantos oficiales de policía que se encontraban entre el cordón que contenía a los independentistas, y los PPNN. Solicitamos que se comunicase al jefe del operativo que acabaríamos la reunión a las ocho y media; el primero en recibir la noticia retiró su visera y con gesto entre grave y amable, confesó que él era el responsable de los Mossos, su chaleco engalonado así lo atestiguaba. Tras un escueto cruce de palabras, nos despedimos con un apretón de manos para mayor rabia de los que nos increpaban.

  A continuación guardamos un minuto de silencio en honor a las víctimas del terrorismo; acabado, como siempre, aplaudimos; los independentistas que también habían terminado de corear "Los Segadores", quedaron perplejos -!- y tardaron unos segundos en reaccionar y volver a sus gritos de "Puta España", "Visca Terra Lliure", etc. Parece como si hubiesen pensado por un instante que les aplaudíamos a ellos... En fin.  En ningún momento hubo respuesta por nuestra parte, esto honra a los PPNN, en ningún momento se atendieron a las provocaciones. Al abandonar la Plaza, enfilando el pasaje que lleva a la Plaza de San Miguel, el pequeño grupo de concentrados, levantamos el brazo a modo de despedida, todos al unísono, sin acuerdo previo; la algarabía en la Plaza se San Jaime se hizo aún más sonora. Un grito de ¡Viva España! se escapó no sabemos de la garganta de quién, y la bronca a nuestras espaldas superó lo anterior.  Una docena de Mossos que bloqueaban la entrada a la Plaza de San Miguel se retiraron y con sus espaldas contra las paredes del callejón nos hicieron el pasillo, luego recibimos escolta hasta que nos diluimos entre las gentes de las calles de Barcelona. 

Saliendo de la plaza escoltados por los Mossos d'Esquadra
 
Dicen los sabios buenos, que la Libertad es un bien preciado, y como tal, cuesta mucho conseguirlo y bien poco perderlo. Yo diría que hoy es un bien, poco apreciado, por el desconocimiento de su dimensión. El lema de los PPNN-BCN es: "Verdad, Justicia, y Libertad", esto resume nuestro discurso y nos define. En la Plaza de San Jaime de Barcelona, este 11 de septiembre, hemos puesto de manifiesto la intención de ejercer nuestra Libertad como cada mes, en un círculo discreto de hermandad. El gran despliegue de medios policiales necesarios para que haya sido posible, mide a todas luces, cuánto falta para que la Libertad sea plena en Cataluña. Es triste, pero es así. En el discurso de los sabios, la situación es crítica por no haberse alcanzado la tan preciada Libertad, en el nuestro, catastrófica, pues ella misma como objetivo, no está presente, de forma clara y limpia en la mayoría de nuestra sociedad. ¿Por dónde caminan nuestros "pastores"?.

  Nuestro agradecimiento una vez más a todos los que de una forma u otra estuvieron a nuestro lado, protegiéndonos o participando de nuestros anhelos. Nuestra más absoluta repulsa a los actos de intolerancia que tristemente tenemos que sufrir un día si y otro también.  

AR
   

 
 

1 comentario:

Martha Colmenares dijo...

AR:
Tienes un reconocimiento en mi blog, te dejo el enlace.
Un abrazo, Martha
http://www.marthacolmenares.com/2008/10/03/por-el-apoyo-a-las-victimas-del-terrorismo-2008/